Contexto y disyuntiva para las decisiones interpretativas que haga el Comité Técnico Administrativo
| Autor | Oscar José Dueñas Ruiz |
| Páginas | 135-161 |
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2. Contexto y disyuntiva para las decisiones
interpretativas que haga el Comité Técnico
Administrativo
Para tener una aproximación holística a la perspectiva que tendrá el Comité
Técnico Administrativo, se requiere mencionar el contexto dentro del cual va
a operar, ya que no serán pocas las dicultades que surgirán en una etapa de
exibilización laboral, de primacía de la “bancanización” y de peligrosa inclina-
ción de la judicatura a no proteger los derechos sociales. No sería extraño que
el colectivo en cuyo favor se ha expedido el Convenio, viera en el Comité Téc-
nico Administrativo la instancia salvadora de sus derechos. Eso no lo prevé el
Convenio, pero la verdad es que, por ejemplo, en la y en la las personas
tienen una buena imagen del Comité de Libertad Sindical, de la Comisión de
Expertos, de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y allá acuden,
no como órgano de jurisdicción, sino como mecanismo adecuado para lograr
lo que en justicia corresponde.
Aunque los problemas son globales, la situación político-social de España
y Portugal diere de los demás países iberoamericanos. Los países europeos
han estado girando alrededor del Estado del bienestar y sus vicisitudes. En
América, no se puede hablar propiamente de dicho modelo, pero sí se puede
decir que la ideología neoliberal es aceitada cotidianamente por los medios
de difusión, y aunque buena parte de los ciudadanos se han inclinado por
partidos de izquierda, que se supone respetan y garantizan los derechos so-
ciales, de todas maneras no se vislumbra que en realidad se esté erradicando
el capitalismo salvaje.
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Constitucionalización e internacionalización de los derechos a la salud y a la pensión
2.1. Itinerario neorrealista de las pensiones
Las pensiones hacen parte de las realidades de nuestros pueblos. Mejor sería
decir del neorrealismo contemporáneo porque el hombre del común ve la jubila-
ción en su simplicidad (el cobro de la mesada) y en su universalidad (la pensión).
La redacción del Convenio Multilateral da una esperanza al trabajador
migrante. Pero sería un suicidio volver a los “universales” de la escolástica.
Ese trabajador migrante es un ser de carne y hueso con familia que labora
hoy en España, mañana en Latinoamérica, en cualquiera de los países donde
el Convenio ya está vigente. El peor de los mundos sería el de un Convenio
aprobado pero no efectivo.
En todo el planeta se habla de las pensiones, para defenderlas o para
pisotearlas. Para muchos trabajadores la jubilación adquiere la dimensión de
una tragedia griega, es como si se tratara de una película de Vittorio de Sica,
o de Fellini, o de Antonioni o de Visconti porque, como lo señala el lósofo
Julio Cabrera:
De todas maneras, y para arriesgar una hipótesis que facilite nuestro
trabajo, entiendo que la visión de “realidad” presente en los lmes
neorrealistas parece ser formulable, de manera conceptual, y apro-
ximadamente, como: conjunto de hechos cotidianos y colectivos, de
contenido social, que pueden ser empíricamente vistos y vividos por
cualquiera.1
Es una tragedia neorrealista que en los países capitalistas se mantenga
el sistema y sus estructuras pese a lo acontecido a partir de 2008 y que para
lograr esto se haga recaer el peso de la crisis en los trabajadores y en los pen-
sionados. La respuesta de los gobiernos y de la sociedad no se ha expresado
en la reconstrucción del Estado, como aconteció en la década del treinta,
cuando se reconocieron derechos a los trabajadores para salvar el capitalismo.
En el presente siglo, en la gran mayoría de los países, con medidas tácticas y
no estratégicas se desea solucionarle el problema a los causantes de la crisis y
no a la población en general, por eso se adopta la vía contraria a la de 1930 y,
actualmente, para salvar el sistema no se reconocen derechos sino que se res-
tringen. Como los banqueros (causantes de la crisis) tienen el “rol” de manejar
1 Cabrera, Julio, Cine: cien años de losofía, editorial Gedisa, 1ª Edición, 1999, Barcelona, p. 66.
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