Los despojos del vencido - Artículos de Baldomero Sanín Cano en la revista Hispania - Años de vértigo. Baldomero Sanín Cano y la revista Hispania (1912-1916) - Libros y Revistas - VLEX 857284202

Los despojos del vencido

AutorRafael Rubiano Muñoz/Juan Guillermo Gómez García/Baldomero Sanín Cano
Cargo del AutorSociólogo y magíster en Ciencia política de la Universidad de Antioquia/Abogado de la Universidad Externado de Colombia con estudios de filosofía en la Universidad Nacional de Colombia/Autor
Páginas201-205
201
LOS DESPOJOS DEL VENCIDO
Revista Hispania, n.º 26, Londres, 1 de febrero de 1914, pp. 928-
929.
las aves del cIelo, que no aran ni siembran ni tienen graneros,
no carecen por eso de cuidados. Desde su más tierna edad están
circundadas de enemigos. En el nido las atacan los gavilanes y
los milanos. Las ratas mismas suelen acercarse a esos seres inde-
fensos en horas de hambre inextinguible, para devorarlos impu-
nemente. Los chicos merodeadores toman estas criaturas de sus
nidos calientes, bajo la angustiosa algarabía de los padres, tan
solo por el gusto de ejercer actos de soberanía en la persona de
seres indefensos y más débiles. En el trópico las plagas que azotan
las tiernas generaciones de las aves son aún más numerosas. Allí
vive la golondrina nocturna o chotacabras, que en sus paseos de
noctámbula empedernida, cuando no da con el ratón, que es su
plato exquisito, o con la mariposa crepuscular en grande abun-
dancia, recorre al merodeo infame de los nidos mal defendidos.
Y por último, la mosca hipoderma ejercita también sus capacida-
des destructoras en una forma incomparablemente cruel. Depo-
sita sobre la piel sana y desnuda de los polluelos del gorrión sus
huevos alevosos. La larva repugnante crece sobre las espaldas de
la avecilla implume, formando un tumor casi tan grande como el
cuerpo de la víctima. Los tormentos que ha de experimentar esa
pobre criatura con tamaño parásito en su seno pueden apenas
comprenderlo quienes hayan sentido en el cuerpo los resultados
de una visita domiciliaria llevada a cabo por la Hypoderma bovis,

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