Editorial
| Autor | David Valencia Villamizar |
| Cargo | Director del Centro de Investigaciones de la Facultad de Derecho de la USTA |
| Páginas | 7-10 |
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VIeI / Vol. 9, N.° 2 / julio-diciembre 2014 / Bogotá, D. C. / Universidad Santo Tomás / pp. 7-10
Editorial
David Valencia Villamizar
Director del Centro de Investigaciones de la
Facultad de Derecho de la USTA
En un mundo de vigilancia generalizada, estrategias post-panópticas y apetito visual
insaciable, desbordante y amenazador, este número recoge aportes que piensan
la esfera de lo público y la exigencia de transparencia en los procesos políticos
latinoamericanos. Así las cosas, se debate sobre el rol del Estado al proporcionar
información sobre sus actuaciones frente a exigencias de la sociedad civil en estos
asuntos. De esta suerte, el rol de un monstruoso Estado de vigilancia se intenta
contrapesar con una observación sobre los mecanismos institucionales de control y
participación democrática.
Comenzando en el escenario chileno, se examina la ley de transparencia en
contextos municipales especícos, valiéndose en este caso de una metodología
que recoge información acotada la región de la Araucanía). Se verica un fuerte
nivel de incumplimiento en el acceso a información pública (TA), casi como si la
inercia histórica de los arcana imperii cubriera ominosamente el panorama de la
administración chilena.
Dada la comunicación y la hiperuidez tecno-racional glo-balcanizada actual, estudios
como el mencionado resultan muy pertinentes y paradójicos, textos en los que se traza
un lum genealógico acerca de la idea de gobiernos transparentres. No sin estupor
se constata el contraste entre este principio administrativo y la opacidad constitutiva
de relaciones de dominación asimétricas y excluyentes. El lósofo Byung-Chul Han
en su Sociedad de la transprencia (Herder, 2013) ha mostrado cómo en un mundo de
visibilidad total las posibilidades creativas y reexivas escasean. Consonantemente,
Octavio Paz en su inquietante prólogo a Las enseñanzas de don Juan, una forma Yaqui
de conocimiento (Castaneda, F.C.E. 1998) nos alertaba al respecto : “El exceso de luz
es igual al exceso de sombra: no deja ver”.
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